Del Autoconsumo colectivo a las Comunidades Energéticas. 

Luz Tagoror es una herramienta para facilitar el empoderamiento ciudadano en el campo de la energía. Su lema «La energía del encuentro» intenta llenar el vacío democrático dentro del sector energético. Por un lado está la inercia social canaria de los terratenientes, aguatenientes y electrotenientes, que intentan mantener sus cuotas de poder. Por otro lado está la ciudanía, que supone a las fuerzas de la naturaleza como propias y por ende la energía debería ser gratis.

Nosotros hemos elegido el papel de concienciar a la ciudadanía en este sentido. «Tomemos las riendas de nuestra energía«. Este acto es un derecho, pero también una gran responsabilidad. Esa gran responsabilidad, si la asumimos bien, es decir, dentro del marco legal, implica un despliegue de trabajadores de alta especialización que nos llevarán de la mano a un sistema eléctrico más democrático y más limpio.

Siempre sin perder las raíces reflejadas en la siguiente historia.
Un discípulo observaba a su maestro extraer agua con una cuerda y un barde directamente de un pozo. El discípulo le preguntó al maestro que por qué no instalaba una polea, a lo que el maestro le respondió que si lo hacía, temía estar más preocupado por la polea que por el agua. 

Luz Tagoror se preocupa por las poleas, pero somos muy conscientes de que lo importante es el agua, y la frase, «La energía del encuentro» aspira a resolver con justicia social y ambiental la polea, para concentrarnos en lo importante; el Ser juntos.